- Eres increíble, tía. No sé por qué tengo tanta suerte.
+ ¡Gracias! Hacía mucho que no me decían esto. Te lo agradezco de verdad.
- ¡Anda tonta! Porque quizá es tan obvio que es así. Que la gente no lo dice.
Conversación real entre una amiga y yo. Porque cuando la amistad supera estos límites, hay que dejarlo plasmado.
Gracias por este año de fuerza, esperanza, comprensión y apoyo mutuo.
Ocho bizcocho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario